Preparando la piel para el frío

Evitar cambios de temperatura e hidratar son algunos de los pasos que hay que seguir para mantener el rostro en óptimas condiciones en invierno.

Es común pensar que la piel sólo necesita cuidado en verano, lo que está lejos de ser verdad. La temporada otoño/invierno produce que la piel viva constantes cambios de temperatura cuando uno pasa de lugares cerrados a abiertos, lo que produce sensibilidad, envejecimiento y deshidratación.

A continuación, te mostramos qué hacer para evitar que tu piel se vea dañada con el frio.

Hidratación

Opta por una crema con componentes humectantes como la urea, que atraen el agua hacia el interior de la dermis. También es importante que la crema que apliques tenga componentes oclusivos que funcionan como barrera para evitar la pérdida de agua a través de la piel.

Utiliza protector solar

El sol también afecta la piel en la temporada de invierno, por lo que no debes dejar de utilizar tu protector todos los días. Idealmente factor 50, sobre todo si vas a realizar actividades al aire libre.

Evita cambios bruscos de temperatura

Los vasos se dilatan y los capilares se rompen cuando la piel se ve enfrentada al frio de forma violenta. Pasar del frio al calor constantemente puede ser perjudicial para tu piel generando resequedad.

Limpieza

En esta época es muy importar que limpies bien tu piel en la mañana y la noche. Debes elegir el producto cuidadosamente para que no contenga compuestos que puedan irritar y aumentar más la agresión en tu rostro. Opta por un limpiador para piel sensible.

Evita el cigarro

El cigarro produce que la dermis y epidermis pierdan su grosor producto de los radicales libres que genera el fumar que, sumado a las agresiones externas provocadas por el frío, harán que tu piel luzca mal cuidada.

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