Por Francisca Guevara
El tema de las uñas fue y sigue siendo un karma en mi vida. Desde chica sufrí cierto grado de ansiedad y lamentablemente desquitaba este problema con mis manos. ¡Sí, me comía las uñas! Pero, aunque sabía que estaba mal, no lo podía controlar. Toda mi adolescencia sentí vergüenza de mis dedos y siempre los andaba escondiendo para que no me los miraran. Las ganas de poder tener una manicure linda siempre estuvieron, pero era algo que me superaba, hasta que me di cuenta que las manos dicen mucho de una persona y me empecé a preocupar del tema.
Según una publicación realizada por el Huffington Post, el 30% de los niños, el 45% de los adolescentes, el 25% de los adultos jóvenes y el 5% de los adultos mayores se muerden las uñas. Es un problema que se denomina onicofagia que se relaciona al estrés, ansiedad o en algunos casos a una mala costumbre que se obtuvo en la niñez.
Les diré que no ha sido fácil para mi superar este problema, pero hace unos 5 años que ya no me las como y es realmente asombroso el cambio. Aunque no lo crean existen riesgos al morderse constantemente las uñas. Lo primero es contraer bacterias que se encuentran bajo las uñas como E. Coli o la Salmonella. Por otro lado, los dientes pueden salirse de su posición normal, deformarse o desgastarse. Y finalmente, en casos más extremos, se pueden formar hasta verrugas por el virus del papiloma humano.
Ya habiéndoles explicado por qué es tan malo este hábito, ahora deben saber que, aunque no sufran de este problema, las uñas se deben cuidar al igual que el resto del cuerpo si queremos que crezcan fuertes, sanas y lindas.
Algunos consejos que no están de más:
-Cortar y limar frecuentemente
-Usa guantes cada vez que uses productos de limpieza, ya que los componentes que poseen son muy fuertes y pueden debilitar las uñas.
– Secar bien tus dedos al lavar las manos, ya que la humedad en exceso puede hacer que las uñas se debiliten.
– Utilizar esmaltes de buena calidad y en lo posible desmaquillantes sin acetona que sean ricos en grasas y aceites.
-No debemos dejar de lado en nuestra dieta aquellas comidas que contengan proteínas, hierro y vitamina B, así lograremos desde el interior que las uñas crezcan con fuerza y en buen estado.
Yo por mi parte, seguiré en la lucha de controlar la ansiedad y evitar llevarme las manos a la boca, para no tirar por la borda el sacrificio que me ha llevado a recuperar mis uñas.