Carretera Austral ¡Hasta Chaitén en Camper!

Muy pocas cosas se comparan con aquella sensación de tomarse vacaciones cuando todos están trabajando. En esta oportunidad queremos hacer algo diferente. No el típico viaje al caribe ni al sudeste asiático. Esta vez , queremos conocer la Carretera Austral hasta Chaitén ¡arriba de una camper!

Armamos nuestras maletas y tomamos un vuelo a Puerto Montt. Tenemos dos opciones: si eres más convencional ahí podrás arrendar un motorhome en www.worldwidecampers.com; pero si eres más ondero, en Puerto Varas, podemos conseguir una Wicked Camper en www.wickedcampers.com, un furgón pintado con llamativos diseños, el cual es preferido muchas veces por turistas extranjeros y jóvenes que vienen de distintas partes a recorrer el sur de nuestro país.

Ambos transportes, poseen en su interior una cama, mesa, un mini lavaplatos, entre otros. Todo lo necesario para dar inicio a nuestra aventura que durará una semana. Si bien los valores de arriendos superan los 55 mil pesos por día, preferirlos supone un ahorro en alojamientos y, sobre todo, libertad de desplazamiento.

¿Qué es lo primero? Llenar el estanque de nuestra camper o motorhome, porque así nos aseguramos de no quedar en panne “del tonto” en pleno recorrido, ya que que las bencineras no abundan en La Carretera Austral.

Partimos nuestro viaje. Desde Puerto Montt manejaremos 46 kilómetros hasta llegar a Caleta La Arena, una pequeña localidad dónde comenzaremos nuestra travesía arriba de un ferry. Cruzaremos el mar del Reloncaví durante 30 minutos hasta llegar a Caleta Puelche. Desde aquí, seguimos rumbo a Hornopirén por un camino pavimentado que luego de algunos kilómetros se transforma en piedras. Música: Spotify o algún pendrive será una buena opción, ya que la señal de las radios así como vienen, se van.

Este lugar posee uno de las vistas más hermosas que puedes encontrar en el sur de nuestro país. La panorámica es amplia e incluye cerros verdes, montañas grises, un volcán, mar azul turquesa. Como la vida de camper lo permite todo, tómate tu tiempo y bájate a tomar un café con un kuchen sureño en un pequeño local, ubicado en el deck principal de Hornopirén ¡Una belleza!

Desde esta zona, podrás organizar un trekking al volcán que posee el mismo nombre o disfrutar de los baños termales que se encuentran antes de llegar a este lugar.

Luego de unos días, nuestro viaje continúa. Desde Hornopirén, podremos realizar un segundo transbordo para navegar durante seis horas y así llegar a Chaitén, ciudad donde el volcán del mismo nombre hizo erupción en 2008.

Luego de recorrer la ciudad y alrededores podremos tomar rumbo al Parque Pumalín que se extiendes desde la Cordillera de Los Andes hasta la Costa del Pacífico. El lugar se hizo más conocido gracias a Douglas Tompkins, y con más de 290 mil hectáreas, es uno de los proyectos de conservación más grandes y diversos de Sudamérica, convirtiéndose en uno de los destinos imperdibles de la zona.

Este parque posee senderos con vistas incomparables y termas que harán de tu paso por este lugar, uno de tus favoritos. Cascadas, volcanes, bosques. Toninas, lobos de mar e incluso ballenas podrás observar si es que la naturaleza está de tu lado.

Desde aquí, las opciones son múltiples; 25 km al sur de Chaitén se encuentra Futaleufú, paraíso de los kayakistas. Otro destino para visitar es el lago Yelcho, conocido por sus aguas de origen glaciar color verde esmeralda, el cual se encuentra rodeado por montañas cubiertas de hielo y bosques y aguas abiertas. Si quieres practicar la pesca con mosca, ¡este es el lugar!

Más al sur se encuentra el Parque Nacional Queulatt. Bosques templados y más caminos en dónde perderse. Si tienen suerte, podrás encontrarte con una Rana de Darwin o con un Pudú. Tómate unos días acá.

El tiempo es poco y los lugares son muchos. Por eso es importante planificar tus días, así alcanzarás a estar en los lugares que más quieras y así puedas realizar las actividades que más te gusten.