Hombres en la cocina

El mundo está cambiando y lo que pareciera ser antes un espacio relegado solo para mujeres hoy es compartido por ambos sexos.

Desde pequeño Daniel Hurtado nunca tuvo interés por acercarse a la cocina, pues le parecía un lugar para mujeres. Hoy, a sus 30 años lamenta no haberlo hecho. “Cuando me fui a vivir solo fue tragicómico. No sabía cocinar arroz ni pasta”, asegura.

El caso de Patricio Ugarte (44) es parecido. “Crecí en una familia en la que siempre me cocinaron. Luego me casé y mi señora junto a la asesora del hogar eran las encargadas de preparar lo que se comía en la casa. Hoy soy separado y vivo solo, y aprender a cocinar a esta edad ha sido todo un desafío”.

Ya sea por falta de interés o machismo de la época, muchos hombres en nuestro país no saben cocinar. Pese a esto, existe un grupo que pareciera, como en un cuento de hadas, ser la excepción a la regla. En su mayoría son hombres profesionales, solteros o casados, entre 30 y 45 años, que conocen de restaurantes, vinos y están muy bien informados respecto a temas gastronómicos.

Benjamín Fortuny es chef e ingeniero comercial que desde 2010 ofrece “Cursos de Cocina”. Hoy la empresa ubicada en pleno barrio Bellavista ofrece clases particulares solo para hombres. “Muchos llegan sin saber cocinar nada, pero esa es la idea en los talleres para principiantes. La recepción ha sido mejor de la esperada. Muchos se animan y esta área cada día ha dejado de ser dominada solo por mujeres”, explica.

La ocupación de estos hombres es muy variada, “ya que hemos recibido empresarios independientes, ingenieros, periodistas, doctores, abogados y padres jóvenes que desean aprender a cocinar junto a sus hijos”.

Según Fortuny, el módulos de cocina más solicitado por “ellos” son el de principiantes que incluye todos los implementos, ingredientes y utensilios. Quienes los han tomado, luego pasan a talleres más específicos como los de panadería artesanal, coctelería y sushirolls.

“Cursos de Cocina” este último tiempo también han recibido a muchos hombres que los envían sus parejas con el fin de que comiencen a ayudar en las labores domésticas y necesarias del hogar, dato que coincide con las cifras entregadas en mayo de 2015 por el Instituto Nacional de Estadísticas (INE) que arrojó que en 2014 un 48,4 por ciento de las mujeres de nuestro país están insertas en el mercado laboral, teniendo menos tiempo para dedicarle a las tareas domésticas, y por ende, a la cocina.

El gastrosexual

El término fue creado hace años y marca una tendencia de hombres que gustan del buen vivir a través de la cocina, lo que les permite desarrollar su identidad masculina. Este grupo no cocina para “sobrevivir”, compra utensilios necesarios e ingredientes exclusivos que buscan impresionar y sorprender a sus invitados con platos modernos y deliciosos.

Cristóbal Lira (38) aprendió desde pequeño a cocinar junto a su padre, “él siempre me dijo que para conquistar a una mujer había que hacerlo a través de su estómago”.

Y aunque nuestra sociedad siempre dijo que era al revés, el padre de Cristóbal no estaba tan perdido. Según un estudio realizado por neurocientíficos de Londres y publicado por el portal Daily Mail, arrojó que siete de cada diez mujeres consideran que su pareja es más sexy cuando le prepara una taza de café.

Las cifras lo avalan, un hombre que cocine resulta más atractivo para las mujeres. Ahora que ya lo sabes, ¿estás preparado para aprender a cocinar y mejorar las técnicas culinarias?