Dra. Andrea Jara
Como vimos en el capitulo anterior, existen tres áreas de tratamientos en el rejuvenecimiento facial, tensoras, bioestimulantes y rellenos, y hoy hablaremos de esta última, se conoce como relleno o filler a todos los materiales biocompatibles capaces de ocupar un espacio que se ha formado producto de la pérdida de elasticidad, como por ejemplo las líneas al lado del a nariz.
La verdad es que los usos de los rellenos son múltiples, desde relleno de manos, glúteos, mamas, arrugas faciales, modelación de narices, mentón, mejillas, etc. Siempre con una correcta indicación.
Existen en el mercado una gran cantidad de rellenos, hay reabsorbibles y no reabsorbibles, densos y livianos. Algunos muy en boca son AQUAMID, nutricell, Ellance, biopolímeros, siliconas, ácido hialurónico, entre otros.
Cada uno de estos tiene sus características específicas, indicaciones y contraindicaciones; por lo tanto, cuando llegue el momento de elegir, deben preguntar cuáles son estas para no cometer un error al momento de aplicar el producto.
Ya deben haber visto, seguramente, en televisión lo que pasa cuando se aplica un relleno no indicado en un lugar no apropiado, esos FISHlips o más conocidas como labios de pescado, hoy popularizadas aún más por esa sexy pose de las selfies con la trompita para adelante, los pómulos sobresalientes (que a veces más que rejuvenecer hacen que uno parezca de otro planeta, del planeta de Mi Amigo Mac, si saben a lo que me refiero…). Estas sensuales formas, bien indicadas y efectuadas como corresponden, responden a reglas armónicas de los componentes dentofaciales que, al aumentarlos cuidadosamente, pueden lograr la «sensualizacion» de los rostros además de rejuvenecerlos. Este, es uno de los más comunes para los rellenos y por eso es importante tocarlo. ¿Qué colocar? Particularmente, recomiendo siempre usar materiales reabsorbibles y que además tengan un antídoto, es decir una forma de revertir lo hecho en caso de no complacer al paciente. El ácido hialurónico cumple con estas características, por eso es uno de los rellenos estrella en el mercado mundial de hoy. Existen muchas marcas y densidades con el fin de ser utilizado estratégicamente en las áreas que se necesite. Su duración puede ir de 1 mes a 3 años, lo que también varia con el metabolismo individual de cada uno. Entonces qué tenemos que tener en cuenta al momento de la consulta: qué ácido colocaran, de dónde proviene, si tiene aprobaciones de salud internacionales importantes, en qué zona, cuánto dura y dónde lo aplicaran. Un ácido denso puede ir en nariz, pómulo o mentón, no así uno liviano o medio, que será de menor duración y se aplicara en zonas blandas como surcos, labios, manos, etc. Así que mis queridos, mucho cuidado al momento de elegir, mucho respeto al momento de aplicarse, no quiero ver más caras de pescaditos de porcelana caminado por ahí, la naturalidad es la clave de la belleza, de todas las bellezas.
Nos vemos pronto, con la vanguardia en tratamientos de onda natural…